miércoles, 27 de julio de 2016

PLANTAS Y CONCRETO HACEN LAS PACES

Redacción Repentina

En los últimos años, los niveles de contaminación se elevaron, por lo que en la Cuidad de México se han implementado medidas que buscan una mejor calidad de aire para los habitantes, mismas que apoyan la creencia de una urbanización menos perjudicial para el medio ambiente. Se pusieron en marcha proyectos que pretenden demostrar que es posible mantener un equilibrio en el que coexistan el concreto y la naturaleza.

La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, creará una barrera verde de 18 millones de árboles en puntos estratégicos del Valle de México, que absorberá y evitará que contaminantes se mantengan suspendidos en la atmósfera, de la misma forma, se planteó la posibilidad de colocar árboles en las vías más transitadas de la ciudad.

Encausado por dicha problemática, el arquitecto Fernando Ortiz Monasterio, reconocido por su trabajo en Verde Vertical, proyectos en los que se construyeron 20 mil metros cuadrados de áreas verdes en la Ciudad de México; propuso transformar las columnas del segundo piso de periférico en jardines verticales.
El proyecto llamado Vía Verde, con la colocación de 40 mil metros cuadrados de jardines a lo largo de más de 30 kilómetros en aproximadamente mil columnas de la vía principal de la ciudad, implica la naturalización urbana más grande del mundo. La instalación no será invasiva para las columnas, contará con un sistema de riego automatizado en el que se utilizará agua de lluvia y de ser necesario se complementará con agua tratada.

Así mismo, un grupo de alumnos de la Facultad de Arquitectura de la UNAM, integrado por Alexis Maya Hernández, César Moreno Soto, Leonardo Rojas Elías y Gabriela Rojas Elías, obtuvieron el primer lugar en el Festival Flores y Jardines del Jardín Botánico de Chapultepec, en el que realizaron el proyecto Urbe Natura, que consiste en un jardín que hace posible la convivencia de lo urbano con la naturaleza, siendo un ejemplo para que más arquitectos construyan en pro de una ciudad menos contaminada.
Urbe Natura consta de un solo módulo de jardineras, caminos y bancas hechas de blocks de concreto en armonía con platas suculentas, cactáceas. Uno de los aspectos más importantes, es que se trata de un jardín en el que las personas pueden pasear y sentarse en las bancas formadas por los blocks.
“La idea es hacer conciencia de que se puede lograr un equilibrio entre lo verde (la naturaleza) y el block que es la ciudad, lo urbano”, comentó Alexis Maya en entrevista para Repentina.


Obtén más información de Urbe Natura en  Repentina Mayo 2016.

Fotografía:cortesía.