Redacción Repentina
En los últimos años, los niveles de contaminación se
elevaron, por lo que en la Cuidad de México se han implementado medidas que
buscan una mejor calidad de aire para los habitantes, mismas que apoyan la
creencia de una urbanización menos perjudicial para el medio ambiente. Se pusieron
en marcha proyectos que pretenden demostrar que es posible mantener un
equilibrio en el que coexistan el concreto y la naturaleza.
La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales,
creará una barrera verde de 18 millones de árboles en puntos estratégicos del
Valle de México, que absorberá y evitará que contaminantes se mantengan
suspendidos en la atmósfera, de la misma forma, se planteó la posibilidad de
colocar árboles en las vías más transitadas de la ciudad.
Encausado por dicha problemática, el arquitecto
Fernando Ortiz Monasterio, reconocido por su trabajo en Verde Vertical, proyectos en los que se construyeron 20 mil metros
cuadrados de áreas verdes en la Ciudad de México; propuso transformar las
columnas del segundo piso de periférico en jardines verticales.
El proyecto llamado Vía Verde, con la colocación de 40 mil metros cuadrados de jardines
a lo largo de más de 30 kilómetros en aproximadamente mil columnas de la vía
principal de la ciudad, implica la naturalización urbana más grande del mundo. La
instalación no será invasiva para las columnas, contará con un sistema de riego
automatizado en el que se utilizará agua de lluvia y de ser necesario se
complementará con agua tratada.
Así mismo, un grupo de alumnos de la Facultad de
Arquitectura de la UNAM, integrado por Alexis Maya Hernández, César Moreno
Soto, Leonardo Rojas Elías y Gabriela Rojas Elías, obtuvieron el primer lugar
en el Festival Flores y Jardines del Jardín Botánico de Chapultepec, en el que
realizaron el proyecto Urbe Natura,
que consiste en un jardín que hace posible la convivencia de lo urbano con la
naturaleza, siendo un ejemplo para que más arquitectos construyan en pro de una
ciudad menos contaminada.
Urbe Natura consta de un solo módulo de jardineras, caminos y
bancas hechas de blocks de concreto en armonía con platas suculentas, cactáceas.
Uno de los aspectos más importantes, es que se trata de un jardín en el que las
personas pueden pasear y sentarse en las bancas formadas por los blocks.
“La idea es hacer conciencia de que se puede lograr un
equilibrio entre lo verde (la naturaleza) y el block que es la ciudad, lo
urbano”, comentó Alexis Maya en entrevista para Repentina.
Obtén más información de Urbe Natura en Repentina Mayo
2016.
Fotografía:cortesía.